Un modelo de simulación para priorizar las medidas sanitarias más efectivas contra el VIH da como resultado alcanzar en nuestro país un 100-95-96 antes del final de la década.
A finales del año 2020 la Unidad de Vigilancia de VIH, ITS y Hepatitis del Ministerio de Sanidad publicó la estimación del continuo de atención del VIH en España 2017-2020: el 87% de las personas con VIH conoce su diagnóstico; el 97,3% de ellas recibe tratamiento antirretroviral; y el 90% de estas últimas alcanza carga viral indetectable. El objetivo de ONUSIDA para 2020 era alcanzar el 90-90-90. Es decir, suspendemos en el primer 90. Y para 2030, el objetivo es alcanzar un 95-95-95…
¿Podemos lograrlo? Un grupo de expertos, liderados por Pep Coll, médico e investigador de la Fundación Lucha contra el Sida, ha puesto en marcha un proyecto cuyo objetivo es evaluar la efectividad y el impacto de diversas intervenciones sobre el ‘continuum’ de cuidados en VIH (diagnóstico, tratamiento e indetectabilidad) en diferentes escenarios y con diferentes grupos de población (hombres que tienen sexo con hombres, mujeres transgénero, hombres y mujeres con relaciones heterosexuales, trabajadores/as sexuales, personas que se inyectan drogas, migrantes…). Coll ve posible alcanzar los objetivos, “aunque es necesario aumentar los esfuerzos e implementar nuevas estrategias, sobre todo en el primer 90”.
Para ello, se ha creado un modelo analítico que permite predecir el impacto de cada intervención o intervenciones sobre cada uno de los escalones del ‘continuum’.
El modelo se llevó a cabo en cuatro fases en las que participó un grupo de expertos multidisciplinar:
Para el doctor Coll, “está claro que en lo que flojeamos es en el diagnóstico. Debería incidirse en este componente mediante estrategias que han demostrado su efectividad, que son bastantes, y también ser creativos para pensar nuevas estrategias. Son muchas las actividades que pueden llevarse a cabo, pero lo importante es que se adapten al grupo de población al que van dirigidas”.
La efectividad de las intervenciones analizadas se definió por el aumento porcentual del diagnóstico, el tratamiento y la supresión viral tras su implementación, dirigidas a toda la población y a grupos específicos de alto riesgo. La implementación de ocho intervenciones para el diagnóstico, tres para el tratamiento y ocho para la supresión viral para las poblaciones objetivo durante el periodo 2020-2030 aumentaría la continuidad de la atención hasta alcanzar aproximadamente el 100% de los casos diagnosticados (salvo casos residuales indetectables), el 98% de los tratados y el 96% de los suprimidos virológicamente. El impacto económico estimado asociado a las intervenciones elegidas fue de aproximadamente 14,3 millones de euros anuales, de los cuales 1,5 millones se asociaron al diagnóstico, 12,5 millones al tratamiento y 220.506 euros a la aplicación de las intervenciones.
millones de euros anuales. Impacto económico de las intervenciones elegidas, de los cuales 1,5 millones se asocian al diagnóstico, 12,5 millones al tratamiento y 220.506 euros a la aplicación de las intervenciones.
España alcanzaría estos ratios en la lucha contra el VIH para 2030 si se aplican las medidas propuestas por el equipo liderado por el docto Pep Coll.
