El doctor Jorge del Romero, director del Centro Sandoval, no puede evitar que se le escape una sonrisa cuando habla de lo que, tal vez, sea el logro del que se siente más orgulloso. Eso no lo dice él, pero su mirada es casi una declaración a cámara. Desde el año 2002, Sandoval, referencia en el diagnóstico y tratamiento de enfermedades de transmisión sexual, ha logrado que se lleven a término más de 300 gestaciones naturales en personas que viven con VIH. “Tenemos personas que han tenido uno, dos, tres y hasta cuatro hijos. Y en todas estas gestaciones no ha habido ningún caso de transmisión sexual ni ningún caso de transmisión vertical en las parejas en las que el miembro positivo era la mujer”, destaca Del Romero.
La sonrisa también se le cae de la boca a Carmen Rodríguez, directora del laboratorio del Centro Sandoval: “Todos los niños que han nacido gracias a los consejos y al programa de Sandoval son el orgullo del centro”.
Hay que tener en cuenta que el doctor Del Romero llegó al centro que ahora dirige hace cuatro décadas, “cuando la enfermedad no tenía ni nombre”, dice. “En todo este tiempo, hemos normalizado la vida de las personas que viven con VIH, y eso es un cambio radical. De estar enfrentándonos a la muerte, hemos pasado a estar ahora enfrentándonos a resolver temas relacionados con la vida”, subraya.
Alcanzar este punto no ha sido fácil, pero desde Sandoval siempre lo han tenido claro. El centro presume, precisamente, de la atención a las parejas serodiscordantes. “Nosotros apostamos desde hace muchos años por estas parejas, muchas veces incluso mientras notábamos que otros profesionales de la salud no entendían el objetivo de nuestro trabajo. Decían: “Están locos en Sandoval”, y nada de eso. Llevábamos analizándolo desde 1989, cuando pusimos en marcha esta cohorte para cubrir las expectativas de estas parejas. En 1996 empezamos a ver que, si había carga indetectable, no había transmisión, y lo publicamos. Historias muy distintas a las que en Sandoval decidimos prestar atención, y que ahora suman 300 gestaciones naturales y más de 15.000 relaciones coitales sin condón con cero casos de transmisión sexual y/o vertical”, afirma Del Romero.
Lo único imprescindible para acceder al programa es que el miembro positivo de la pareja esté persistentemente indetectable: como mínimo seis meses antes de comenzar con el proceso, y con una adherencia al tratamiento superior al 95%. Además, en el caso de que sea la mujer la seropositiva, debe seguir un tratamiento no teratogénico para no hacer daño al bebé.
Sin embargo, y aunque el programa de gestación del centro es su ‘niña bonita’, Sandoval es una referencia principalmente por el diagnóstico y tratamiento de enfermedades de transmisión sexual. “Hay pocos profesionales que sepan tanto del VIH y de las enfermedades de transmisión sexual en España y en Europa como los profesionales del centro”, dice sin dudar Vicente Estrada, jefe de enfermedades infecciosas del Hospital Universitario Clínico San Carlos de Madrid.
Al profundo conocimiento sobre el VIH, se suma una atención especial. “En el Centro Sandoval atienden a los pacientes con enfermedades de transmisión sexual sin cita previa, sin papeles; no les exigen ningún tipo de documento y se les atiende en el mismo día”, afirma el doctor Estrada. “Cuando un paciente es diagnosticado en Sandoval, lo que hacen es ponerse en contacto con nosotros inmediatamente de forma telefónica, y concertamos una cita o el mismo día o al día siguiente o lo antes posible”, añade.
De la misma opinión es Antonio Ruiz, paciente con VIH. “El personal del Centro Sandoval es muy bueno, atento, cariñoso, consolador. Está para abrazarte y para ayudarte. En junio 1994 me diagnosticaron VIH y pensé que me iba a morir en quince años. Se me vino el mundo encima. Hoy, gracias al diagnóstico a tiempo y a la medicación, estoy aquí. Un diagnóstico a tiempo es una victoria”. A eso se dedican en Sandoval. “Aquí las puertas están siempre abiertas, y eso es algo muy importante para aquellos grupos que consideramos más difíciles”, corrobora Del Romero.
En Sandoval, la gente encuentra noventa años de historia. Noventa años garantizan que muchas personas ya conozcan su accesibilidad, su profesionalidad, su especialización en ITS y la inmediatez en el diagnóstico y en el acceso al tratamiento, que es posible gracias a que cuenta con un laboratorio propio.
Marta Ruiz, enfermera del Centro Sandoval, tiene el contacto directo con todos los pacientes y cuenta cómo llegan al centro por primera vez: “La gente tiene miedo a hablar de su vida asexual, piensa que va a ser juzgada. Nosotros trabajamos con aquellas personas que consideran que algo en su vida sexual necesita de nuestro apoyo. Y al centro acuden personas con vidas sexuales muy diferentes. Las personas llegan muy nerviosas, con muchas dudas y reciben un trato respetuoso, ayuda, comprensión. Se les escucha. Esa es la clave”, explica.
Durante los últimos años, en el centro aseguran que ha descendido el número de nuevos casos de VIH que llegan a Sandoval. Para Carmen Rodríguez, la respuesta está en “el diagnóstico precoz y en el tratamiento inmediato, y también gracias a la PrEP”. Ruiz afirma que el mes pasado sólo tuvo en su consulta un positivo. “Era un diagnóstico tardío, una persona que llevaba años sin hacerse la prueba”.
Es en este punto en el que ponen mayor énfasis todos los trabajadores del centro, sin excepción: la importancia de realizar un diagnóstico precoz. “El objetivo del Centro Sandoval es hacer el diagnóstico precoz de todas las enfermedades de transmisión sexual, incluido el VIH, para romper la cadena de transmisión, que es el objetivo real: diagnosticar, tratar y prevenir”, dice contundente Del Romero.
Por ello, por la importancia de tener los resultados de manera inmediata, Carmen Rodríguez cuenta que “el diagnostico lo realizamos el mismo día que atendemos al paciente con el objetivo de enviarlo inmediatamente para tratar al hospital”. “El objetivo del diagnóstico precoz es conseguir cuanto antes la carga viral indetectable. Hemos sido pioneros en el centro en decir que, cuando la carga viral es indetectable, el virus es intransmisible”, dice orgullosa.
Alcanzar la carga indetectable es lo que permite a las personas con VIH llevar una vida normal. Así lo afirma el doctor Estrada, quien explica que el 95% de sus pacientes con VIH “tiene hipotecas a 20 años, tiene hijos … y hace una vida totalmente normal”. Antonio Ruiz también asegura que actualmente se puede llevar una vida normal a pesar de tener VIH: “Tener VIH es como cualquier otra enfermedad; teniendo tus controles y tomando la medicación, ni te mueres, ni vas a tener sida. VIH no significa sida”.
El doctor Del Romero afirma que, aunque queda mucho camino por recorrer, se ha avanzado mucho. “En este momento, año 2021, con una pastilla que tome al día una persona con VIH, sólo con eso, puede controlar la infección”.El estigma, sin embargo, sigue presente. Para la directora del Sandoval, Carmen Rodríguez, muchas personas se hacen la prueba, pero “el miedo a los resultados hace que la gente no vaya a recogerlos”. También para Del Romero esto es un problema: “El miedo que da realizarse una prueba es algo que conviene resolver”.
Todos los avances en el tratamiento no han venido asociados a una disminución del estigma, ni siquiera entre los HSH, pero especialmente entre las mujeres. “Las mujeres no pueden dar la cara porque no saben cómo va a reaccionar su familia, su entorno, la gente del trabajo, en el colegio de los niños… Ese miedo se ha mantenido. Hay algo que me llama mucho la atención: cuando un hombre se entera de que su mujer tiene VIH sale corriendo; al revés, no suele ocurrir tanto”, comenta Del Romero, que concluye: “A mí, si hay algo que me motiva en mi vida profesional, son ellas”.
Jorge del Romero es licenciado en Medicina y Cirugía por la Universidad Complutense de Madrid desde 1980. Especialista Universitario en ITS/VIH y Magíster Universitario en ITS/sida.
Dirige el Centro Sanitario Sandoval de la Consejería de Sanidad de la Comunidad de Madrid desde 1997.
Es miembro fundador de Seisida, de GeSida, de la SEIMC y miembro de IAS (Sociedad Internacional del Sida) y de la European Aids Clinical Society (EACS). Es, además, vicepresidente de la Fundación FIT y profesor de varios cursos de máster y doctorado en la Universidad Complutense de Madrid.
Ha publicado más de 220 artículos en revistas de ámbito nacional e internacional relacionados con la infección del VIH, hepatitis víricas y otras ITS. Ha realizado más de 400 comunicaciones en congresos nacionales e internacionales. Destaca también su participación en diferentes proyectos de investigación como el de la Epidemiología de las ITS en España o el Consejo Reproductivo a Parejas Serodiscordantes al VIH.
Nota: A pesar de que se ha probado que una supresión viral eficaz con un tratamiento antirretroviral reduce sustancialmente el riesgo de transmisión sexual, no se puede excluir un riesgo residual. Se deben tomar precauciones, conforme a las directrices nacionales, para prevenir la transmisión.