Entre 130.000 y 160.000 personas en España están infectadas por el VIH. De ellas, el 13% no sabe que vive con el virus. Así se ha puesto de manifiesto en el XII Congreso Nacional del Grupo de Estudio del Sida (GeSIDA), celebrado en Málaga entre el 30 de noviembre y el 2 de diciembre.
Estos datos confirman que España no ha alcanzado el objetivo 90-90-90 marcado por ONUSIDA para 2020: que el 90% de las personas con VIH estuviera diagnosticado, que el 90% de los diagnosticados recibiera tratamiento y que el 90% de estos alcanzara una carga viral indetectable. Según los últimos datos de la Estimación del Continuo de Atención del VIH en nuestro país, el 86,2% de la población con VIH está diagnosticada, el 93,4% recibe tratamiento y la supresión viral se encuentra en el 90,4% de los casos. Es decir, estamos en un 86-93-90, lo que quiere decir que los problemas se concentran en el primer 90, el que tiene que ver con el diagnóstico.
Más de medio millar de expertos nacionales e internacionales han abordado en la cita de Málaga los principales avances y controversias en la lucha contra el sida. Se han presentado además 200 estudios sobre la transmisión del VIH en España, el envejecimiento de los pacientes que viven con el virus, el chemsex (uso de drogas en contextos sexuales), la profilaxis pre-exposición o los avances conseguidos para lograr el objetivo final de erradicación del virus, entre otros temas.“El congreso de GeSIDA es el gran punto de encuentro de la investigación sobre VIH, una de las citas más relevantes en nuestro calendario anual en la que ponemos en común los avances conseguidos en el último año para así seguir mejorando en nuestra labor”, destaca su presidente, José Ramón Arribas.
“Los numerosos avances conseguidos en la lucha contra el sida pueden caer en saco rato si no se reconoce la especialidad de enfermedades infecciosas”
José Ramón Arribas
Presidente de GeSIDA
Arribas reivindicó en su intervención inaugural la necesidad de reconocer como especialidad médica a enfermedades infecciosas: “Los numerosos avances conseguidos en la lucha contra el sida pueden caer en saco rato si no se reconoce una especialidad que asegure la continuidad del trabajo emprendido por numerosos expertos hace ahora justo 40 años, cuando irrumpió la pandemia del sida, atraiga a nuevos profesionales, garantice el relevo generacional, y aporte experiencia y capacitación a otros escenarios, como el dibujado recientemente por la pandemia de la Covid-19″, destacó.
En este sentido, el presidente de GeSIDA reclama contar con esa especialidad “no sólo en previsión de las necesidades futuras que precisará la lucha contra el VIH sino en las que ya plantea actualmente”. «Hoy día, el VIH-sida sigue siendo un grave problema de salud pública que, si bien no genera tantas muertes como hace dos décadas, carece de cura y genera un profundo impacto en la calidad de vida de las personas que tienen el virus», añadió. Entre los retos para el futuro, el presidente de GeSIDA remarcó la mejora de las estrategias de prevención y el diagnóstico precoz. En el primero de los casos, los expertos recuerdan la importancia de incrementar la realización de pruebas diagnósticas por parte de médicos de atención primaria y médicos especialistas, así como los autotest.
GeSIDA es uno de los grupos de estudio de la Sociedad Española de Enfermedades Infecciosas y Microbiología Clínica (SEIMC). Está integrado por profesionales sanitarios que trabajan con el objetivo de promover, fomentar y difundir la investigación de la infección por el VIH y sus complicaciones con la finalidad de favorecer una asistencia de la máxima calidad a las personas afectadas por el virus. Creado en 1995, hoy aglutina a más de 630 profesionales que desarrollan su labor en hospitales y centros de investigación repartidos por toda la geografía española.